Impactos del sector de la construcción sobre el capital natural
La valoración del capital natural en el sector de la construcción permite transformar los futuros desarrollos urbanos y la movilidad en actividades verdaderamente sostenibles. La actividad constructiva, sea del tipo que sea, tiene como principal efecto un cambio irreversible en el uso del territorio. Los espacios ocupados por ecosistemas naturales, en mejor o peor estado de conservación, desaparecen en pro de nuevos antroposistemas (carreteras, edificios, polígonos industriales…).
La creación de estos antroposistemas viene de la mano de grandes movimientos de tierras, cambio en los relieves, eliminación de la cubierta vegetal, sellado de superficies con pavimentos, cambios en los flujos de escorrentía… la lista es larga. Además, estos sistemas antrópicos se caracterizan por tener una estructura simplificada y en muchos incompatible con la provisión de servicios ecosistémicos.
Durante los procesos de construcción los cursos de agua y la calidad de la misma pueden verse eventualmente afectados. Pero sin duda, uno de los impactos mayores que generan las construcciones se deben a la capacidad de fragmentar el territorio.
Esta capacidad de fragmentación tiene que ver con la morfología de la construcción y el área que ocupa. Y también con los vertederos de residuos que genera. Parece obvio que no es igual el efecto que produce una carretera sobre la conectividad territorial que un barrio a las afueras de una ciudad. Estos efectos deberán evaluarse caso por caso. Lo que sí es evidente es el impacto que tienen las construcciones sobre la calidad visual del paisaje y por tanto sobre los servicios ecosistémicos culturales relacionados con la interacción directa e indirecta con la naturaleza.
La valoración de estos impactos en términos de servicios ecosistémicos puede ayudar a las empresas del sector de la construcción a diseñar medidas de restauración y compensación más eficaces y con mayor retorno para la compañía.

El sector de la construcción y el capital natural
El sector de la construcción no sólo impacta sino que también depende de los recursos naturales. La disponibilidad de materias primas como materiales de construcción o los recursos hídricos, son clave en cualquier proceso constructivo.Además, por las características propias de algunas construcciones, su desarrollo puede verse condicionado por la presencia de espacios naturales protegidos que habrá que ver cómo salvan y no dañar.
Los efectos negativos del cambio climático suponen también un reto para este sector. La mayor incidencia de eventos extremos pone en riesgo el funcionamiento de muchas infraestructuras de transporte. Por ello, podríamos decir que la construcción de infraestructuras depende directamente de la capacidad de los ecosistemas de neutralizar estos efectos, a través del control de la erosión o de la regulación del ciclo hidrológico.
Por todo esto, la valoración del capital natural debe ser una parte fundamental en la toma de decisiones del sector de la construcción.
La valoración del capital natural permite a las empresas del sector de la construcción:
- Conocer los servicios ecosistémicos de un territorio antes del desarrollo de la infraestructura
- Cuantificar de manera más precisa los impactos
- Calcular el riesgo de inversión a través de la obtención de deuda de capital natural
- Mejorar la transparencia en su reporte corporativo de cara a sus grupos de interés
Servicios ecosistémicos materiales
Sea del sector que sea tú empresa, el primer paso para empezar a valorar el capital natural es tener claro los impactos y dependencias que tiene del capital natural. Este análisis de impactos y dependencias podemos recogerlos a través del análisis de materialidad de los que ya hemos hablado en alguna ocasión.
Este análisis de aspectos clave para el desempeño ambiental y operativo de la empresa, es además una herramienta útil de comunicación y contraste de estrategias corporativas con los grupos de interés. En un análisis de materialidad bien hecho, debemos de tener recogida la visión de la compañía, pero también de todos aquellos agentes del territorio que tienen una visión particular de los efectos de nuestra actividad sobre el medio ambiente y el entorno social.
Aquí os dejamos una aproximación general al análisis de materialidad en el sector de la construcción. Este análisis habría que particularizarlo para cada tipo de actividad y contexto socio-ambiental, además de considerar los impactos y dependencias en las distintas fases del ciclo de vida del proyecto.