Esta semana se celebra el aniversario de la Agenda Urbana Española (AUE), un documento estratégico creado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (antiguo Ministerio de Fomento) que tiene como objetivo generar una hoja de ruta común para actores públicos y privados, que intervienen la planificación y la gestión de las ciudades.
La AUE aterriza al desarrollo y la planificación urbana otros marcos que buscan la sostenibilidad de las ciudades de manera general como la Agenda 2030, la nueva Agenda Urbana de las Naciones Unidas y la Agenda Urbana para la Unión Europea. Además la AUE ha sido diseñada para ayudar a las administraciones regionales y locales a priorizar acciones para alcanzar la sostenibilidad.
Hasta aquí, y salvo por este enfoque un poco más pragmático, no parece que el planteamiento haya cambiado mucho con respecto al resto de marcos que abordan la sostenibilidad urbana. Salvo, por un par de cosas que os vamos a contar ahora y que ¡nos llenan de orgullo y satisfacción!
Los procesos de urbanización degradan el suelo y aumentan la fragmentación del territorio.
La AUE no es posible sin la Infraestructura Verde
El primer objetivo de la Agenda Urbana Española es Ordenar el Territorio y hacer un uso racional del suelo, conservarlo y protegerlo. Dentro de este objetivo se identifica que la urbanización y la construcción de infraestructuras lineales e industriales fomentan la degradación del suelo. Estos procesos de degradación se traducen en problemas de impermeabilización, contaminación y la pérdida de la fertilidad. Además, a una escala mayor, se identifica la fragmentación de los ecosistemas naturales como un problema a resolver.
Ante esta situación, la AUE propone mejorar las infraestructuras verdes y azules y vincularlas con el contexto natural. Para conseguir este objetivo se deben recuperar las funcionalidades ecológicas de los ecosistemas urbanos y periurbanos. En concreto, y citamos textualmente, la AUE habla de:
“Incorporar a la planificación y a la gestión urbanística el concepto de infraestructuras verdes urbanas, como soluciones multifuncionales basadas en la naturaleza […] Organizar y diseñar las redes de infraestructuras verdes y azules teniendo en cuenta criterios de conectividad ecológica y de las características geomorfológicas del territorio, con el objetivo de optimizar la prestación de servicios eco-sistémicos a los ciudadanos.”
El hecho de que en un marco de planificación urbana se incorporen estos términos nos parece del todo un acierto y la única manera de conseguir ciudades verdaderamente sostenibles. ¡Por fin la naturaleza urbana es un eje vertebrador de la planificación y no un simple adorno verde! Pero es que además, y por si esto fuera poco, esto de incorporar la infraestructura verde en la planificación urbana no puede hacerse de cualquier manera.
La planificación de los espacios verdes urbanos mejoran la interacción de las personas entre sí y con la naturaleza.
La restauración ecológica como una herramienta para adaptar las ciudades al cambio climático
En el diagnóstico de la AUE el cambio climático y sus efectos en las urbes tienen un lugar destacado. Se sabe que España es un país muy expuesto al efecto de los fenómenos extremos que se derivan de la crisis climática y que la intensidad de estos efectos puede aumentar en las zonas urbanas. Se sabe también, que esta intensidad puede reducirse con una adecuada planificación que reduzca la ocupación del suelo y fomente la creación de zonas verdes. Estos espacios públicos tienen además una función social, en tanto que fomentan la convivencia en las ciudades, y facilitan la interacción con la biodiversidad urbana.
Por todo esto, la AUE se propone mejorar el medio ambiente urbano y la reducción de la contaminación, restaurando los espacios degradados en los ecosistemas urbanos. En concreto, se recomienda la “reconversión de suelos urbanos degradados en zonas verdes y parques para contribuir a la mejora del medio ambiente urbano y a la reducción de la contaminación, mediante el uso de técnicas de Restauración Ecológica”. Así, tal y como lo habéis leído. Increíble ¿no?.
Efectivamente, parece que esta Agenda Urbana España está alineada también con la Estrategia Estatal de Infraestructura Verde, Conectividad y Restauración Ecológicas y eso es una gran noticia para nosotras. No solo porque es una oportunidad para seguir trabajando con las administraciones públicas en la generación de planes de infraestructura verde que hoy cobran aún más sentido, sino porque a medio plazo todos viviremos en entornos urbanos más saludables.